Alexa, ¿sabías que puedes ser hackeada?
Es verdad. Al igual que los ordenadores y los smartphones, los equipos basados en comandos de voz, como la famosa línea de altavoces inteligentes Echo de Amazon, son vulnerables a los ataques que les pueden obligar a hacer cosas que sus propietarios o diseñadores no querrían o no autorizaron.
Un equipo de investigadores ha demostrado que los asistentes de voz que se encuentran dentro de los altavoces y móviles pueden ser manipulados para que abran puertas de garaje o arranquen coches utilizando las vibraciones de un rayo láser apuntando a los micrófonos de los dispositivos para simular los comandos de voz de sus propietarios. Por otra parte, otro equipo de investigadores ha demostrado que se puede bloquear a Alexa para que no responda a su dueño tocando música de fondo con un tono especial.
Y algunos consumidores han denunciado que al utilizar un asistente de voz para marcar un número de atención al cliente, fueron conectados a un operador de estafas.
Es difícil saber cómo de preocupados deberían de estar los consumidores y las empresas por las vulnerabilidades potenciales de los dispositivos y sistemas de voz, según los expertos en seguridad. Pero los usuarios deben ser conscientes de que por muy divertidos y útiles que sean estos aparatos, no están exentos de riesgos. Y los riesgos sólo aumentarán a medida que los dispositivos se hagan más populares y se conecten más servicios y otros gadgets a ellos.
«Estamos abriendo un nuevo mundo de amenazas con estas actividades en el que algunas personas realmente inteligentes pueden empezar a descubrir cómo hacer cosas que provoquen que estos dispositivos se comporten de manera inesperada», dice Martin Reynolds, analista de la empresa de investigación de mercado Gartner, centrada en tecnologías emergentes.